martes, 21 de abril de 2015

Porqué no quiero tener hijos

"No todo el que tenga un útero tiene que tener un hijo así como no todo el que tenga cuerdas vocales tiene que ser cantante de ópera" - Gloria Steinem

Cuando comparto con mi familia mi decisión de no tener hijos es típico que reciba por respuesta comentarios del tipo: "Ya te quiero ver en diez años", "Eso dices ahora" o "Te voy a grabar para enseñarle el video a tus hijos" y fue única aquella vez que me comentaron: "Pues es cosa de cada quien" siendo esta oración la más cercana a respeto por mi decisión. Lo cierto es que esa vez fue también la única en que me permitieron explicar el porqué... a medias pues no me dejaron terminar mi listado.

La única razón que pude exponer fue:

*Considero que los hijos echan a perder la relación con tu pareja

Mis tías indagaron sobre si coincidían o no conmigo, incluso mi hermana apeló a la ciencia derribando mi argumento, lo cierto es que lo que diga la ciencia no cambia mi parecer. Creo que una vez que la pareja tiene hijos la relación va en declive: dejan de lado el romanticismo, los detalles, el interés en seguir enamorándose día a día el uno al otro, las sorpresas e incluso el dinero que originalmente se invertía para ellos ahora pasa a invertirse en los hijos. Yendo más lejos, con el paso de los años los hijos se convierten en la única razón por la cual se sigue estando juntos y eso no me agrada.

*El bebé va a crecer

Esa criatura saldrá del vientre después de nueve meses, tendrá semanas de edad, meses, años... después entrará al pre-escolar, luego a la primaria... y cuando te des cuenta será un adolescente. He sido profesora, he tratado con adolescentes, conozco los tipos de personalidad que pueden tener y ninguna me parece soportable 24/7. Digo, he tenido buenos alumnos pero también agradezco el no tenerlos bajo mi jurisdicción por más de cuatro horas cinco días a la semana... me volvería loca.

*No me gustan los niños

Como profesora también he trabajado con niños y el tenerlos bajo mi jurisdicción cuatro horas al día cinco días a la semana... ME VOLVIÓ LOCA. Sí, soy poco paciente con los niños. Ruego por que se sienten lejos de mí en el transporte público, odio a los bebés llorones, rara vez tengo el impulso de cargar bebés, ignoro a los niños que tengo enfrente, evito conversaciones... ¡incluso con mis primas pequeñas! Y sí, mis tías ya saben que no cuentan conmigo para niñera. So... keep me away from children!

*No tengo instinto maternal

¿Mencioné ya que di clases a niños? Bueno, pues nunca me nació platicar con ellos en sus recesos, nunca fui capaz de consolarlos cuando lloraban por caídas y mucho menos fui capaz de ir a sobarles... me sorprende que los padres no me hayan armado un alboroto. No me nace abrazar niños... digo, puedo abrazar a mis semejantes pero a un niño no. Cuando oigo un niño llorar no me parte el corazón, me dan ganas de azotarlo para que se calle de una buena vez o que llore con provecho. No me nace cuidar de nadie, y no me nace toquetear bebés y hablarles como bobos. No, definitivamente no soy nada maternal.

*Le temo al parto

He escuchado tantas historias de partos tanto naturales como por césarea que no encuentro otra forma para describirlas mas que "historias de terror". Son tantas experiencias que lo único que tienen en común es que son vivencias que no quiero vivir en carne propia. Ya sea natural o por césarea... no hay a cuál irle. Ambos horrorizan por igual... es mucho dolor físico que no me creo capaz de soportar.

*La maternidad no es un juego de prueba y error

Cualquier pequeño error que cometas durante la crianza puede (y lo hará) repercutir seriamente en el futuro del hijo. No se enseña a ser padres pero tampoco se vale echar a perder vidas mientras aprendes a serlo.

*Trabajo sobre maternidad

No hay nada que me moleste más que aquellas madres que por irse a trabajar encargan a sus hijos con sus madres (es decir, con la abuela del niño). ¡Espera! Tu madre te crió y te cuidó, no le corresponde criar y cuidar a TUS hijos. Yo soy de la idea de que si vas a tener hijos te corresponde estar con ellos 24/7 hasta la edad escolar en la que puedes trabajar mientras ellos están en la escuela. Si tu trabajo no permite esto entonces tus opciones son: renunciar o no tener hijos. Sí, sé que la economía actual está difícil... lo cual podría significar que no es época para traer criaturas nuevas al mundo... pero creo que se puede llegar a compaginar el trabajo con la maternidad si se busca bien. Yo, por mi parte, le doy más peso a mi desarrollo profesional que a convertirme en madre.

*No haré sacrificios

Porque estoy agradecida con mis padres sé que para serlo hay que hacer sacrificios: no comprarme ropa nueva para comprársela al hijo, no comprarme zapatos para cómprarselos al hijo, no comprarme un libro para pagar colegiaturas y un largo etcétera de sacrificios que sólo una persona capaz de amar ciega e incondicionalmente por el resto de su vida (o sea, una persona muy cabrona) es capaz de hacer y que merece mi admiración por ello pues yo no lo puedo hacer.  Amo a mis padres y les retribuiré todo lo que me dieron y tal vez ellos y mi hermana sean las únicas personas en el mundo a quiénes puedo amar ciega e incondicionalmente pues sé que no he amado de esa forma a ninguna de mis parejas y no amaré así a alguien que me haga pasar por carencias. No estoy dispuesta a hacer sacrificios materiales ni personales (pueden llamarme egoísta pero eso no cambia nada), seamos sinceros, ¿cuántas personas han rechazado un mejor puesto de trabajo porque implicaba efectos secundarios en su familia? Es una situación que se da y es una situación en la que no me quiero ver. Quiero ganar suficiente dinero para pagar todos mis gastos y algún que otro capricho, quiero ser capaz de aceptar un mejor trabajo sin preocuparme por si los viajes o los horarios afectarán a un tercero, eso es lo que quiero.

Y bueno, quizá la razón más fuerte que tengo es:

*Porque tener hijos no me hace ni mejor persona ni mujer

No necesito dar vida a otro ser para ser totalmente mujer. Dar vida a otro ser no me hace mejor persona. No necesito hijos para sentirme plena y completa.
Soy mujer pero mi única función en la vida no es procrear, ser madre no me define ni me definirá.
Tener hijos es una elección, no una obligación.
Yo he decido sobreponer mi carrera y a mí misma ante la maternidad. Lo he decidido y eso no me hace una mujer vacía ni solitaria. Tengo amigos, tengo familia y he tenido parejas sentimentales, no me veo teniendo un bebé y no quiero tenerlo.
Respeto y admiro a aquellas mujeres que deciden y decidieron lo contrario, sólo pido respeto a mi decisión.

Issiz Westenra

miércoles, 15 de abril de 2015

Disfrutando de "Algo de un tal Shakespeare"

Admiro fervientemente a Shakespeare y mi trabajo de tesis es sobre su obra Romeo y Julieta; razones suficientes para que el pasado 13 de abril a las 8 pm me diera cita en la Sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque para ver la obra Algo de un tal Shakespeare. Cabe mencionar que el 30 de marzo ya había acudido al teatro para poder ver el montaje pero tuve la mala suerte de no alcanzar boletos para la función, hecho que sólo consiguió avivar más mi interés por la puesta en escena.
Sin embargo, este lunes conseguí mi boleto, esperaba formada en la fila para entrar al recinto cuando aparece un hombre a un lado de la puerta de la sala con traje y casco de ciclista y algo que simula ser un cetro, el hombre suelta un grito grave siendo esto un contacto directo con el público, hecho que me preocupa un poco siendo que este tipo de cosas es algo que me incomoda. Llega mi momento de entrar y el hombre no me dice nada, sólo asiente y me deja pasar, entro a la sala y tomo asiento, es entonces cuando noto de que no es un hombre sino que son dos y que sólo hacen contacto directo con grupos grandes de asistentes por lo que ya puedo respirar con alivio. En el escenario se puede ver una cocina simulada: una estufa con verduras, sartenes, algunos utensilios alrededor y arriba de ella, abajo recipientes con globos y otros utensilios.
Dan primera llamada de una forma cómica con la cual no me siento molesta ni forzada a apagar el celular, lo hago con gusto y casi siento que es por impulso mío (aunque ya debería tenerlo implementado en mi cerebro puesto que soy gente de teatro). Entran los actores vestidos con camisetas y pantalones cortos, acto seguido comienzan a equiparse con casco, rodilleras, coderas y utensilios de cocina mientras dicen  algunos diálogos emblemáticos de las obras más reconocidas de Shakespeare; dan segunda llamada (con la característica comicidad ya expresada en la llamada anterior), ahora los actores toman algunos vegetales y con ayuda de cuchillos y otros utensilios empiezan a elaborar con ellos las marionetas que interpretarán los personajes importantes de Romeo y Julieta. Una vez que terminan la preparación de las marionetas dan tercera llamada y empieza la función con los actores narrando/representando la obra de forma resumida, un tanto modernizada pero de una forma totalmente divertida.
Terminan Romeo y Julieta, nos comparten algunos datos sobre la obra y luego sobre Shakespeare, datos que darán pie a la siguiente obra: Macbeth
Para Macbeth se ayudan de utensilios de cocina como sartenes y una parrilla, complementan con agua, fuego y otros elementos. Terminan el cuento de Macbeth y pasan ahora a otro momento de datos sobre Shakespeare que dan como resultado el inicio de la tercera obra: Titus Andronicus.
Para Titus Andronicus son ellos mismos quienes interpretan a Titus, Támora y Lavinia, ayudándose de frutas para representar al resto de los personajes, en esta ocasión nos cuentan la trama con la narración en primera persona. Finalmente hay un espacio de datos y opiniones sobre la carrera de Shakespeare, diálogo que termina en un malentendido y después finaliza la obra.
El montaje es muy cómico, dinámico e incluso un tanto didáctico, características que se hicieron notar desde las llamadas. Entre chistes sobre la situación actual del país, chistes de gente de teatro, chistes personales de los actores y el gag repetitivo (pero nada aburrido ni cansado) que incluye la participación de los (guapos) hombres de la entrada, la obra ofrece una nueva mirada a las obras y la vida de Shakespeare. Es un montaje totalmente entretenido, que hace pasar un buen rato y donde cada elemento en escena adquiere significado propio que se realza con la iluminación y la musicalización.
En fin, una buena puesta en escena muy recomendable de la que espero pueda haber más funciones en otros teatros una vez que este 4 de mayo concluya su temporada en el CCB.
Issiz Westenra

lunes, 6 de abril de 2015

Porqué estoy molesta con 'Insurgente'

Ya tiene cerca de un año que me leí la trilogía 'Divergente', me vi la primera entrega cinematográfica y tiene lógica que apenas se estrenara la segunda entrega corriera al cine a verla.
  'Insurgente' me pareció buena película: mucha acción ininterrumpida, buena musicalización, buenas actuaciones, excelente ambientación, buenas coreografías de pelea (aunque había partes en las que se notaba en extremo que era una coreografía) y excelentes efectos; sin embargo, hay algo que me molesta y no es solamente que hayan cambiado muchas cosas sobre el libro o que hayan omitido mi escena favorita: la escena del suero de la paz, mi molestia tiene relación con la única "escena sexual" de la película y a la vez no tiene relación con el hecho de que la misma no estaba incluida en el libro, estoy sumamente molesta con la forma en que fue tratada.
  Enfoquémonos en el contexto de la trama: Tris está prácticamente destrozada emocionalmente, es normal que busque consuelo en Cuatro, su novio, porque incluso la mujer más fuerte sobre la faz de la tierra tiene momentos de debilidad en los que necesita apoyo y confort de alguien, y está bien, es verosímil, es humano y eso no me molesta, la causa de mi molestia radica en que del simple consuelo terminen teniendo sexo convirtiendo al sexo en la principal fuente de consuelo y no un acto de amor... además de que terminan convirtiendo la primera vez de Tris en un arranque de desesperación emocional que a su vez es, a mi parecer, una de las peores razones para tener relaciones sexuales por primera vez.
      Enfoquémonos ahora en el contexto 'social': la primera vez es un momento complicado, lleno de miedo, de nerviosismo, e incluso un poco de dolor, es un momento determinante e importante en la vida como para ser tomado como cualquier otra cosa. Yo, por mi parte, no comparto el ideal de llegar virgen al matrimonio, pero sí soy de la idea que sostiene que el primer encuentro sexual debería ser por convicción propia, debería ser un acto proveniente de decisión y determinación propia, preferentemente por amor y en caso de no ser así, que simplemente sea porque realmente se tiene el convencimiento de querer hacerlo.
     Juntemos los enfoques. Lo que sucede en 'Insurgente' es que el primer encuentro sexual de Tris termina siendo banalizado, termina siendo un impulso, una necesidad de despistar la confusión, la tristeza, la ansiedad y la angustia por un momento... y el hecho de que después del acto Tris se levante y rompa la promesa que le hizo a Cuatro tampoco ayuda mucho a ver la escena de otra forma.
        Por otro lado, la escena de algún modo se vuelve inverosímil si tomamos en cuenta el perfil de los personajes. Hasta el momento habíamos visto en Tris a una chica fuerte, decidida, dispuesta a hacer toda clase de sacrificios por el bien de los demás. En Cuatro habíamos visto a un chico dañado cuya máscara de tipo rudo y frío le ha servido para evitarse más daños, un chico fuerte en busca de superarse a sí mismo, un chico protector que busca evitar que dañen a aquellos a quienes ama. Luego entonces ocurre un hecho que hace tambalear a Tris, un hecho que aún así no impide que ella se mantenga firme a sus convicciones. Sabemos que el hecho golpea de igual manera a ambos pero Cuatro decide ser más fuerte que Tris, ser fuerte por los dos. ¿Qué ocurre cuando Tris no puede seguir con la farsa de soportarlo y se desmorona frente a Cuatro? Él hará lo que todo novio haría: consolarla, darle confort, apoyarla, darle un abrazo, un beso, secará sus lágrimas y le dará palabras de aliento... en lugar de eso vemos un intercambio de palabras, un beso (iniciado por Tris) que sube de intensidad y luego el acto sexual que hace ver a Tris más débil y voluble de lo que realmente es y a Cuatro como un verdadero patán aprovechador (por no decir 'violador').
    Para rematar... ¿es que acaso se les olvidó que uno de los miedos de Tris es (precisamente) tener relaciones sexuales? Ese no es un miedo que se supera de la noche a la mañana. Por otro lado, creo que hay razones muy bien expuestas en el libro como para que Tris y Cuatro no tuvieran relaciones sexuales en 'Insurgente' porque además no era necesario, no era primordial para la trama...al contrario de muchas otras cosas que omitieron y cambiaron. Tal vez mi molestia, en el fondo, no sólo sea por cómo se retrató la escena sino también por el hecho de que el cine en Hollywood realmente intenta meter sexo en cualquier película aunque el mismo no sea en sí algo atrayente o influyente en la trama... y esto molesta más tomando en cuenta que el principal público receptor de la trilogía son jóvenes.
        Querido Hollywood: deja de echar leña al fuego ya incendiado del inicio sexual precoz.
Issiz Westenra